lunes, 20 de enero de 2014

A veces me pregunto: ¿Para que tengo Facebook?


 No se si lo que me ocurre pasará en todos los círculos de amigos, pero al menos en el mío se observa que cada integrante está imbuido en sus asuntos, en determinados temas que le interesan y que aprovecha para  colgarlos durante toda la jornada en el mencionado sitio. Otros son de poco participar, pero tampoco tienen la gentileza (al menos de vez en cuando) de poner un "me gusta" en las publicaciones de los demás.
Y así se va llevando la cosa, viendo que para nada les interesa perder el tiempo molestándose en observar y leer o escuchar lo que los demás publican.
Yo busco la manera de incentivarlos poniéndoles cada tanto algún que otro de los mencionados "me gusta" pero tampoco reaccionan. Tal es así que estoy escribiendo y compartiendo mucho menos de lo que lo hacía unos cuantos meses atrás.
¿Terminarás desapareciendo Facebook o tendrás que modificar las reglas?


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